Uno la tira a un costado, pero aunque de latón o bronce o de lo que fuere, un día la vamos a sacar de una caja o un estante, y mientras la libramos de ese polvo que sólo ella sabe lo que lo sufrió, la medalla nos contará recuerdos, buenos y dolorosos seguramente, pero vivencias al fin. Y como dijo un grande de verdad, "No solo de pan vive el hombre! Que cosa fuera la masa sin cantera, creeme q estamos hechos de vivencias.
PD: A veces me la creo la de fotografo... esta foto me gusta mucho.